
Cuando uno de los nuestros se cruza con un espécimen, lo primero que salta a la vista es la total y absoluta ausencia de criterio. Seres que prefieren pasar tres días acicalándose pero que no soportan cinco minutos de cancha. Criaturas que eligen explotar antes que tirarse un pedo. Entes capaces de entregarse a horas de vidriera pero que no se comen una de karate entera ni drogadas. El sexo opuesto es complicado. Parecen no comprender que lo único que necesita nuestra especie es un sillón, una tele y una lata de cerveza. Incluso sólo lo último.
¿Qué quieren las mujeres? Las hemos visto pintarse en el 180 a través de los más peligrosos cráteres porteños y las frenadas más intimidantes a riesgo de tatuarse un 8 en la pupila con el delineador, ¿y para qué? Para después mentir que no lo hacen para impresionarnos. Las hemos visto comer toneladas de Cabsha, ¿y para qué? Para escucharlas rezongar eternamente sobre la culpa que les genera deglutir 354 calorías. Cada vez.
Vaya uno a saber qué quieren en realidad. Mi miedo más grande es que quieran dominar el mundo. Por las dudas, vuelvo a prevenir: el día que una mujer sea presidente de Estados Unidos, ¡volvamos a esclavizarlas, viejo! ¡ JUIPFF !
4 comentarios:
Con ése titulo, el blog no puede ser menos que genial.
A tu salút.
atte,
Juan Garlos Petruzza.-
Los árabes recomiendan que de vez en cuando les pegues a tu mujer. Y que si vos no sabes por qué, ella seguro sabe...
JoCT
Yo no recomiendo la violencia física.La réplica puede ser fatal. No os olvideis que una mujer siempre anda con elementos contundentes en el bolso. De no ser asi, como os explicais el peso que nuestros adminiculos carteriles tienen?. Para mi, un garrotazo no es algo viable. Ahora bien, si le dais una extensión de la credit card, todos contentos y chochos nos vamos a comer a lo de Fechoría para ver gente famosa...
Adios, y que se lo pasen lindo.
Cuando quieras ve a lavarte el culo, machista de pacotilla.
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